Me voy pa' Murcia
Recuerdo del verano No. 3
Su edificio más importante es la Catedral donde se encuentra la diócesis de Cartagena. Como su construcción tardó siglos, acoge diferentes estilos como el gótico en su interior y el barroco en su fachada. La torre del campanario es la que más estilos agrupa, curiosamente cada piso corresponde a un período de construcción y por supuesto, de estilo. Así pues los dos primeros tramos de la torre son renacentistas, el tercero es barroco, el campanario rococó y la cúpula neoclásica.
Las festividades más populares de Murcia son las Fiestas de Primavera, en especial El entierro de la Sardina, un gran desfile que parodia los cortejos fúnebres y que por su aire carnavalesco atrae igual a vecinos que a turistas. La fiesta termina con la quema de una escultura en forma de sardina (naturalmente) y un asombroso espectáculo de fuegos artificiales. 
Gracias a Paco, el chico bondadoso y hospitalario que encontré en un bar, caminé por las calles de la ciudad añorada, conocí sus tabernas y los alrededores como el parque regional de Carrascoy y El Valle donde se puede merendar, hacer largas caminatas y además aventurarse entre las ruinas. 
A Paco también le agradezco los sabrosos pollos asados y los exquisitos dulces de las pastelerías de Murcia. Por añadidura, por primera vez me senté frente a una tele de un establecimiento para ver completo un partido de fútbol. Se disputaba quién iría a la semifinal del Mundial. Aquella noche jugaba España contra Paraguay y yo me encontraba en territorio español. ¿A quién le apuestas? –preguntó Paco alzando su copa. ¡A España! Y ganó.

Hace tiempo quería conocerla, pero cómo llegar hasta ella. Resulta fácil cuando alguien se ofrece para que conozcas la ciudad, pero dónde encontrarlo. Había oído decir que los murcianos son hospitalarios pero no conocía a ninguno. Entonces, por esas cosas del trotamundos, choque mi vaso con el vaso de un chico en un bar de Alicante. ¿De dónde eres? –le pregunté. De Murcia. Mis ojos pestañearon con curiosidad. Nunca he estado allí, me gustaría tanto conocerla. Pues… cuando quieras. Tal vez fue precipitado pero a los cubanos no hay que invitarlos dos veces. El fin de semana le dije a mi sobrino: Me voy pa’ Murcia. ¡Qué! ¿Conoces a alguien allí? Bueno… no exactamente pero… un chico prometió mostrarme la ciudad. ¿Te vas así como así a un paradero desconocido? Tengo mi móvil y dinero por si tengo que virar pa’trá de manera imprevista. ¿Estás seguro adónde vas? Si, pa’ Murcia. 
Murcia es la ciudad capital de la provincia del mismo nombre y su enclave se encuentra en las márgenes del río Segura al sudeste de la península ibérica. Con aproximadamente 436 870 habitantes, gracias a su vasta producción agrícola y capacidad de exportación se le conoce como La Huerta de Europa. Sus orígenes no han sido precisados pero se cree que primero hubo una villa romana que devino en ciudad islámica y luego, a partir del siglo XIII, en un protectorado del reino de Castilla. Es una ciudad con gran tradición universitaria desde que se fundó la primera universidad en 1272.









Comentarios
Que rico viaje! Esa fuente de la sardina me encanta. Nunca habia pensado en Murcia, pero despues de esto ya quiero ir!
Besos!!
y que seguro tu al aventurarte con un cuasi-desconocido como guia!